jueves, 27 de diciembre de 2012


¿Deseáis saber la razón por la cual el cristiano verdadero
muestra estos sentimientos peculiares hacia Cristo. y
por los cuales tanto se distingue?
En las palabras de San
Juan la tenemos expresada: "Nosotros le amamos a Él, porque
Él nos amó primero" (Juan 4:19). El versículo, sin duda
alguna, se refiere a Dios el Padre, pero no es menos cierto
de Dios el Hijo.
El cristiano verdadero ama a Cristo por todo lo que ha
hecho por él. Éste ha sufrido en su lugar y muerto por él
en la cruz. Con su sangre lo ha redimido de la culpa, poder,
y consecuencias del pecado. A través de Su Espíritu Santo
lo llamó, e hizo que se arrepintiera, creyera en Cristo y viviera
una vida de esperanza y santidad. Cristo ha borrado
y perdonado todos sus pecados; lo ha librado del cautiverio
del mundo, de la carne, y del diablo; lo arrebató del borde
mismo del infierno, y lo puso en el estrecho sendero que conduce
al cielo. En vez de tinieblas le ha dado luz; en vez de
intranquilidad, le ha dado paz de conciencia; en lugar de incertidumbre,
esperanza; en lugar de muerte, vida. ¿Te maravilla,
pues, que el verdadero creyente ame a Cristo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario