miércoles, 29 de febrero de 2012

EL RIESGO DE LA FE: ISAAC


 EL RIESGO DE LA FE: 
ISAAC 
(Hebreos 11:20) 
INTRODUCCIÓN: la historia de Isaac ha sido usada por muchos predicadores como una 
parábola o emblema de Cristo. Podemos notar en esta historia cinco características notables 
… 
1. Isaac fue, como nuestro Salvador, un hijo de la promesa (Gn. 3:15–17:9). La promesa 
referente a Cristo la hallamos ya en Gn. 3:15. 
2. Fue hijo y heredero único en el sentido material, como Cristo lo es en el sentido 
espiritual (Gn. 24:36; Col. 1:19 y 2:9). 
3. Su nacimiento fue milagroso (Gn. 21:1–5; Is. 7:14; Mt. 1:23; Lc. 1:35). 
4. Fue ofrecido como sacrificio, con la diferencia de que para Cristo no hubo sustitución, 
tuvo que sufrir Él en su persona, a pesar de ser Hijo Unigénito de Dios (Gn. 22:9; Ro. 
8:32). 
5. Fue hijo de la resurrección en figura, como Cristo lo fue en la realidad (He. 11:17–19; 
Ro. 1:4). 
6. Isaac ejerció una gran fe que seguramente le fue comunicada por su padre. Estaba 
dispuesto a que éste le sacrificara, pero tenía plena seguridad de que todo lo que Dios había 

pre anunciado acerca de él ocurriera. Cristo, al hacerse hombre, tuvo que creer que Dios le 
 levantaría de los muertos. Notemos cinco lecciones relacionadas con la fe de Isaac (He. 
3:15): 
a) La verdadera fe siempre tiene en vista cosas venideras, al parecer imposibles. Por 
ejemplo, las que nos son prometidas en Jn. 14:1–3, Hch. 1:9–11, 1 Ts. 13–17, 2 Ts. 1:7–10, 
2 P. 3:10–13 y Ap. 20. Estas cosas son consideradas como ilusiones increíbles por el 
escéptico, pero el creyente las acepta por fe. 
b) La fe es la virtud que más agrada a Dios (He. 11:5). La vida de Isaac fue llena de 
fracasos y errores de su parte; sin embargo, su nombre se encuentra en la lista de los héroes 
de fe, pues la obra perfecta de la fe supera los fracasos y frustraciones (Lc. 22:32). 
c) Cuando la fe es verdadera será probada en cada punto decisivo de la vida. La fe fue 
engendrada en el corazón de Isaac, pero en cada crisis de su vida aparecía una nueva prueba 
para ella. Su punto culminante es el monte Moria, pero también en su matrimonio y al fin 
de su vida, al bendecir a sus hijos (véase 1 P. 1:7; Stg. 1:12). La fe será probada 
constantemente en nuestra vida hasta que deje de ser necesaria en la presencia del Señor. 
d) A veces, la fe brilla más en tiempos de fracaso que en los de victoria. Esto suena a 
paradójico, pero es verdad. La fe de Isaac casi le faltó al ver torcida su voluntad en el caso 
de bendecir a sus hijos, pero él creyó que Dios lo había dispuesto así y aceptó la situación 
creada por su propia debilidad (Mt. 11:26). 
e) La fe es más hermosa cuando la visión terrena desaparece y se hace más penetrante la de 
la otra vida. En Gn. 27:1 leemos que Isaac, envejecido, era débil y ciego, pero aun así 
leemos en el Nuevo Testamento que le fue posible ver al invisible, como todos los héroes 
de la fe en He. 11. 
CONCLUSIÓN: ¡Cuán hermoso es tener tal fe en los últimos días de la vida! (Anécdota: 
había dos mujeres moribundas en un hospital; la una, incrédula, gritó: «¡No quiero morir, 
no quiero ir, no quiero!…». Carecía de la visión de la fe. La otra, creyente, dijo con calma: 
«Señor Jesús, ¡agárrame más fuerte!» Esta última tenía la visión de la fe). 

 ALEGRÍA CARNAL 
(Jonás 4:6) 
INTRODUCCIÓN: historia de Jonás; esperando la destrucción de sus enemigos, recibió la 
calabacera como muestra del cuidado de Dios para con él y como protección del sol fuerte. 
No sabía que el propósito de Dios no era satisfacer el gusto de Jonás, sino enseñarle una 
lección muy necesaria. 
1. Su alegría: la alegría basada en lo físico y en lo carnal pronto pasa; queda entonces 
infelicidad. 
a) Se basó en el placer físico carnal; cuando debía haber gozado grandemente por los 
miles de almas que se entregaron a Dios. 
b) Su atención estuvo en el regalo que le agradó, en lugar de estar en agradar al Dador. 
c) Fue una alegría egoísta, sin amor al prójimo. 
d) Fue alegría sin gratitud. 
2. El gusano: 
a) La palabra hebrea aquí traducida «gusano» es «tholaach», que se refiere al 
«escarabajo rojo» («coccus illicus», en términos técnicos), de donde los antiguos sacaban la 
tinta roja para teñir la ropa fina que se usaba en el Templo y en el Tabernáculo. 
b) Este rojo, tomado de este animalito, se emplea en la Biblia como tipo de la sangre de 
Cristo. 
c) Dios escogió este animalito para destruir la calabacera y así enseñar a Jonás el amor a 
los pecadores perdidos y a tenerles misericordia cuando se arrepienten. 
CONCLUSIÓN: todavía hay cristianos, y hasta predicadores, que necesitan aprender de la 
compasión de Cristo. 

JESÚS, EL PAN DE VIDA



            JESÚS, EL PAN DE VIDA 
                       (Juan 6:1–5, 24–63) 
1. Jesús es el «pan de vida» porque satisface el hambre espiritual: 
a) El alma del hombre anhela el amor, y Cristo vino al mundo para hacernos saber que 
«Dios es amor», y el mismo Hijo de Dios es la suprema revelación del amor divino. Nadie 
puede ver a Cristo en el Calvario y negar el amor de Dios. 
b) El alma anhela el perdón; y Cristo, como en los días de su vida humana, todavía está 
diciendo a cada uno de los penitentes: «Hijo, tus pecados te son perdonados». 
c) El alma anhela la vida eterna; y Cristo dice: «Yo he venido para que tengan vida, y 
para que la tengan en abundancia». 
d) El alma anhela tener conocimiento de Dios, y Jesús dice: «El que me ha visto, ha 
visto al Padre». 
e) El alma anhela felicidad; y en el Apocalipsis de Juan vemos algo de lo que sera el 
mundo más allá de la tumba, y se nos dice que «Dios limpiará toda lágrima de los ojos de 
ellos y la muerte no será más; y no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor». 
2. El pan provee para el cuerpo los medios de crecimiento y de desarrollo: el hombre no 
se desarrolla en su perfección sin dar abrigo en su ser a las influencias benéficas del 
Evangelio de Cristo Jesús. El genio de Byron parece defectuoso cuando se ve al lado del de 
Tennyson; éste fue un cristiano decidido, aquél fue un escéptico. 
3. El pan da fuerza, vigor, vitalidad y energía al cuerpo, y así Cristo viene siendo el 
poder de los cristianos de tal manera que él mismo dijo: «Sin Mí, nada podéis hacer». 

27 Pasajes bíblicos que enseñan explícitamente
que hay un solo Dios

  1. No hay solamente uno o dos pasajes ambiguos que enseñan que hay un solo Dios, sino muchos pasajes que claramente declaran esta verdad cardinal de la Biblia. Cada uno de los siguientes 27 pasajes bíblicos enseñan implícitamente que hay uno, y solo un Dios. La doctrina de la pluralidad de Dioses (encontrada en forma explícita en la Perla de gran precio/Libro de Abraham 4-5) contradice esta enseñanza bíblica fundamental.
  2. Por favor notar que la versión Reina Valera (revisión 1960), usada aquí, utiliza nombres de Dios en español que corresponden a los diferentes títulos y nombres de Dios en hebreo, el idioma del Antiguo Testamento. El nombre en hebreo Jehová (o Yahweh) en español aparece como "Jehová," mientras el título Adonai, que significa "Señor" o "Amo" aparece como "Señor," y la palabra Elojim es traducido como "Dios."
  3. Por ejemplo, en Deuteronomio 4:35, aparece la frase "Jehová es Dios" que traducido literalmente es "Jehová es Elojim." Así que, Jehová y Elojim se usan de una manera que demuestra que son intercambiables en el Antiguo Testamento, y ambos se refieren al Dios único de la Biblia. Estas palabras no pueden designar dos Dioses distintos, como enseña la iglesia Mormona (que dice que Elojim se refiere a Dios el Padre y Jehová se refiere a Jesucristo). Para otros ejemplos, vea Deuteronomio 6:4; 2 Samuel 7:22; 2 Reyes 19:15; Salmo 18:31; Isaías 37:16,20; 44:6,8).
  4. (1) Deuteronomio 4:35, 39 — A ti te fue mostrado, para que supieses que Jehová es Dios, y no hay otro fuera de él. Aprende pues, hoy, y reflexiona en tu corazón que Jehová es Dios arriba en el cielo y abajo en la tierra, y no hay otro.
  5. (2) Deuteronomio 6:4 — Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.
  6. (3) Deuteronomio 32:39 — Ved ahora que yo, yo soy, y no hay dioses conmigo; Yo hago morir, y yo hago vivir; Yo hiero, y yo sano; y no hay quien pueda librar de mi mano.
  7. (4) 2 Samuel 7:22 — Por tanto, tú te has engrandecido, Jehová Dios; por cuanto no hay como tú, ni Hay Dios fuera de ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos.
  8. (5) 1 Reyes 8:60 — A fin de que todos los pueblos de la tierra sepan que Jehová es Dios, y que no hay otro.
  9. (6) 2 Reyes 5:15,16 — Y volvió al varón de Dios, él y toda su compañía, y se puso delante de él, y le dijo: He aquí ahora conozco que no hay Dios en toda la tierra, sino en Israel. Te ruego que recibas algún presente de tu siervo. (16) Mas él dijo: Vive Jehová, en cuya presencia estoy, que no lo aceptaré. Y le instaba que aceptara alguna cosa, pero él no quiso.
  10. (7) 2 Reyes 19:15 — Y oró Ezequías delante de Jehová diciendo: Jehová Dios de Israel, que moras entre los querubines, sólo tú eres Dios de todos los reinos de la tierra; tú hiciste el cielo y la tierra.
  11. (8) Nehemías 9;6 — Tú solo eres Jehová; tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo su ejército, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo que hay en ellos; y tú vivificas todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran.
  12. (9) Salmos 18:31 — Porque ¿quién es Dios sino sólo Jehová? ¿Y qué roca hay fuera de nuestro Dios?
  13. (10) Salmos 86:10 — Porque tú eres grande, y hacedor de maravillas; Sólo tú eres Dios.
  14. (11) Isaías 37:16,20 — Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, que moras entrelos querubines, sólo tú eres Dios de todos los reinos de la tierra; tú hiciste los cielos y la tierra. (20) Ahora pues, Jehová Dios nuestro, libranos de su mano, para que todos los reinos de la tierra conozcan que sólo tú eres Jehová.
  15. (12) Isaías 43:10-11 — Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será despues de mí. (11) Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve.
  16. (13) Isaías 44:6,8 — Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mi no hay Dios. (8) No temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oir desde la antigüedad, y te lo dije? Luego vosotros soís mis testigos. No hay Dios sino yo. No hay Fuerte; no conozco ninguno.
  17. (14) Isaías 45:21 — Proclamad, y hacedlos acercarse, y entren todos en consulta; ¿quién hizo oir esto desde el principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo Jehová? Y no hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador; ningún otro fuera de mí.
  18. (15) Isaías 46:9 — Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mi.
  19. (16) Oseas 13:4 — Mas yo soy Jehová tu Dios desde la tierra de Egipto; no conocerás pues, otro dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí.
  20. (17) Joel 2:27 — Y conoceréis que en medio de Isarel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro y mi pueblo nunca jamás será avergonzado.
  21. (18) Zacarías 14:9 — Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre.
  22. (19) Marcos 12:29-34 — Jesús le respondió: El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a tí mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos. Entonces el escriba le dijo: Bien, Maestro, verdad has dicho, que uno es Dios, y no hay otro fuera de él; y el amarle con todo el corazón, con todo el entendimiento, con toda el alma, y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, en más que todos los holocaustos y sacrificios. Jesús entonces, viendo que había respondido sabiamente, le dijo: No estás lejos del reino de Dios. Y ya ninguno osaba preguntarle.
  23. (20) Juan 17:3 — Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
  24. (21) Romanos 3:30 — Porque Dios es uno, y él justificará por la fe a los de la circuncisión, y por medio de la fe a los de la in-circuncisión.
  25. (22) 1 Corintios 8:4-6 — Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios. Pues aunque haya algunos que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos dioses y muchos señores), para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él.
  26. (23) Gálatas 3:20 — Y el mediador no lo es de uno solo; pero Dios es uno.
  27. (24) Efesios 4:6 — Un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.
  28. (25) 1 Timoteo 1:17 — Por tanto, al Rey do los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén.
  29. (26) 1 Timoteo 2:5 — Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.
  30. (27) Santiago 2:19 — Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.


martes, 28 de febrero de 2012

Un hombre con un mensaje de Dios


Un hombre con un mensaje de Dios 
Job 32.20 
Eliú: Él es mi Dios 
1     era más joven que los otros tres amigos de Job   Job 32.6 
2     había nacido de nuevo por el Espíritu de Dios   Job 33.4 
3     estaba atento a las palabras de los mayores   Job 32.11 
4     era imparcial en su actitud hacia Job   Job 32.21 
5     fue comisionado por Dios para hablar   Job 33.6 
6     fue impulsado por el Espíritu a hablar   Job 32.18 
7     fue directo en todo lo que dijo   Job 33.8 
Su argumento fue: 
Dios es más grande que cualquier hombre, ¿por qué 
resistirle?   Job 33.12 
Dios trata con el hombre para bien de éste; ¿por qué 
criticarle?   Job 33.14 
Dios quiere librar al hombre; ¿por qué no venir a Él?   Job 
33.24

lunes, 27 de febrero de 2012

15 CONSEJO15 CONSEJOS PARA SEGUIR CASADOS TODA LA VIDA..

15 CONSEJO15 CONSEJOS PARA SEGUIR CASADOS TODA LA VIDA...
(1) El primer compromiso que deben hacer es con el Señor, y luego el uno con el otro.

(2)! Si hablas precipitadamente, también debes pedir perdón precipitadamente!

(3)Deben estar de acuerdo en que está bien no estar de acuerdo.

(4)Aprendan a doblarse y no a romperse.

(5)Oren el uno con el otro y el uno por el otro diariamente.

(6)Procuren intereses que ambos puedan disfrutar.

(7)Decidan desde el principio que el divorcio nunca ha de ser una opción.

(8) Nunca esperes que todo en tu matrimonio sea perfecto.

(9)Nunca sean demasiado ancianos como para no tomarse de la mano.

(10)Sé siempre el mejor amigo de tu cónyuge.

(11)Olvídense del televisor y dediquen tiempo el uno al otro.

(12)Nunca se acuesten a dormir sin decir: "Te amo" y decirlo de corazón.

(13) No temas expresar afecto.

(14)Tengan sentido del humor y aprendan a resolver sus propios problemas.

(15) no intenten cambiarse el uno al otro.

*(Como seguir casados toda la vida, Unilit)
Deseo que Dios le bendiga ricamente su matrimonio para toda la vida y así como también sus futuras generaciones.

domingo, 26 de febrero de 2012

FE O FICCION


FE O FICCION
Cerca de mi casa hay un gimnasio en el que los entrenadores personales enseñan físico-culturismo. Al igual que esos entrenadores, los maestros de la prosperidad consideran que su misión es ayudar a los cristianos en el desarrollo de músculos de fe fuertes, para controlar la realidad.
La fe en Dios constituye el punto central de la Biblia. ¿Cómo podría tal énfasis estar equivocado? “De ninguna manera”, piensan muchos... asumiendo que esos maestros se refieran a lo mismo que la Biblia, respecto a lo de las palabras “fe” y “Dios.”
Veneno en una botella de leche
Llenar una botella de leche con veneno no es necesariamente malo. Pero sí lo sería si le damos esta botella a alguien, diciéndole que contiene leche.
Algo semejante sucede en la teología, cuando los maestros toman palabras de la Biblia, las vacían de su contenido, añaden sus propios significados y las hacen pasar como legítimas. Sus seguidores terminan aceptando ideas que rechazarían normalmente.
Es decir que, aun cuando un maestro utilice palabras tales como Dios, fe, Jesús, esto no garantiza que esté enseñando la Palabra de Dios. Puede tratarse de veneno en una botella de leche.
¿Cuál fe?
Kenneth Copeland afirma: La fe es una fuerza poderosa. Es una fuerza tangible. Es una fuerza conductora.
Copeland sostiene: La fe es una fuerza espiritual ... es una sustancia. La fe puede afectar la sustancia natural.
Estos maestros ven la fe como una fuerza mística que manipulamos para nuestra propia ventaja. Si se combina la fe con nuestras propias palabras, se convierte en una catálisis para crear nuestra propia realidad.
Dichos maestros no ven la fe como la sola confianza en Dios, sino como un poder místico con su propio derecho. Para ellos, es casi una ley natural como la gravedad o el electromagnetismo. Aunque no sea una ley física, es tan poderosa como para afectar a la materia.
No nos preocuparía eso si pensáramos que hablan en sentido figurado o  si únicamente fuera un punto de vista de Copeland, podríamos ignorar la anomalía. Sin embargo, es lo que tipifica al movimiento. Charles Capps manifiesta:
La fe es la sustancia o materia prima ... La fe es la sustancia que Dios utilizó para crear el universo y transportó esa fe por medio de sus palabras ... La fe es la sustancia de las cosas, pero no es visible. La fe es una fuerza espiritual.
En caso de suponer que Capps hable en sentido figurado, nótese lo siguiente:
He aquí lo que Dios hizo: Dios llenó Sus palabras con fe. Dios usó Sus palabras como contenedoras y transportadoras de esa fuerza espiritual hacia la oscuridad, pronunciando: ¡Sea la luz! Esa es la manera en que Dios transportó su fe, generando la creación y la transformación.
Copeland hace eco de las palabras de Capp acerca del poder de esta fuerza-sustancia en el escenario de la creación.
Dios usó las palabras para crear los cielos y la tierra ... Cada vez que Dios hablaba, liberaba su fe: el poder creativo que hacía cumplir su palabra.
Estos maestros sostienen que Dios tiene fe y que depende de ella por su poder creativo. El Movimiento de la prosperidad considera esto un hecho autoevidenciable. Al discutir sobre el potencial de la fe en la vida de los cristianos, Copeland se refiere a...
La misma fe que Dios usó al crear ...
Pero, ¿quién creó esta fe-sustancia de la que depende el poder creador de Dios? Si Dios la creó, ¿por qué tendría Él que depender de ella?
¿Y nosotros los humanos?
De acuerdo con la doctrina de la prosperidad, el creyente tiene acceso a la misma fuerza empleada por Dios al crear el mundo. Como pequeños dioses, podemos servirnos a voluntad de esta fe-fuerza y crear la realidad que deseemos. Si carecemos de prosperidad material o buena salud, el problema está en nuestra ignorancia sobre cómo controlar la “fuerza” de la fe.
A través de los siglos, la teología cristiana ha comprendido el significado de la “fe” como la confianza o la creencia en Dios. Cualquiera que sea el significado que los del Movimiento de la prosperidad hayan dado al término, se ve claramente que no concuerda con aquel.
Efecto de choque
A veces me gusta captar la atención de mis estudiantes de teología diciendo: “La fe, en sí misma, no tiene ningún valor, poder o mérito propio. No es una buena obra y no merece recompensa alguna. En ciertos casos, ni siquiera es una virtud.”
El tono radical de mi observación se atenúa cuando explico que la fe es como una caja vacía. El contenido es lo que le da su valor. Si Cristo es el contenido de la caja, su valor es inconmensurable. Pero, ¿qué si el contenido de la caja es el diablo?
La fe en sí misma es moralmente neutral. Adquiere su valor del objeto al cual se la asocia. Viéndola de esta manera, la fe puede ni siquiera ser una virtud, si no está dirigida a Cristo. En efecto, puede incluso tratarse de un vicio si está puesta en un dios falso o dirigida a nuestra autoaprobación.
La fe es el vehículo en el que Cristo se aproxima a nosotros. Cuando un amigo llega en su auto a nuestra casa, pensamos en el amigo, no en el vehículo. Lo que importa es la relación, pero la cercanía no hubiera sido posible sin el transporte. A esto es a lo que me refiero cuando digo que la fe no tiene valor “en sí misma.”
Entonces, si la fe no tiene un valor o virtud inherente, ¿cómo podría ser una fuerza creadora? Cristo es el poseedor de todo aquello. La fe es meramente el vehículo que acerca a Cristo a nosotros.
¿Es la fe una “ley”?
En su libro, Las leyes de la prosperidad, Copeland define la fe como una ley indispensable. Sembramos semillas de fe como un agricultor siembra su cultivo, esperando la cosecha.
Esto es cierto, siempre que lo entendamos como una metáfora acerca de la confianza llana en las promesas de Dios. Si vamos más allá, considerándola una “ley” en el sentido de una fuerza mística, caemos en un grave error.
Solo en una ocasión se refiere la Biblia a la fe como una “ley.”
¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras? No, sino por la ley de la fe (Romanos 3:27).
En el contexto, Pablo contrasta la fe con las obras como el principio por el cual Dios comunica su don de la justicia. Esto no tiene nada que ver con ninguna fuerza mística. La NVI traduce el término griego "ley" como principio, posiblemente para evitar tal confusión. Las Escrituras nunca definen la fe como una “ley” en otro sentido que este.
¿Fe en la fe?
El folleto de Hagin titulado: Tenga fe en su fe, fue un elemento importante en el desarrollo del Movimiento Palabra de fe. Allí se cristalizó el concepto central de que la fe es una ley manipulable.
Para Hagin, tiene perfecto sentido tener fe en nuestra fe. Si la fe es una fuerza que controlamos, deberíamos obtener más fe a medida que crece nuestra capacidad de manipularla. Hagin veía este proceso como una espiral ascendente hacia un poder cada vez mayor.
Hagin estaba en lo correcto si la fe fuera una sustancia mística que manipulamos. De lo contrario, es autodependencia carnal.
¿Y dónde queda la gracia?
El evangelio es un movimiento de la “gracia,” no un movimiento de la “fe.” Cuando Pablo dice: Porque por gracia sois salvos, por medio de la fe... dejó en claro de una vez y por todas la respuesta a la pregunta sobre qué nos salva. La fe NO salva. La gracia es la que salva. La fe es meramente el vehículo que transporta la gracia de Dios.
Gracia significa inmerecido favor de Dios. Si la fe fuera una fuerza o sustancia que podemos manipular, entonces la salvación podría ser una obra que merece recompensa. En ese caso, la fe estaría excluida, por la misma causa que las obras son excluidas... precisamente porque merecería una recompensa.
El apóstol Pablo clarifica
Ahora bien, cuando alguien trabaja, no se le toma en cuenta el salario como un favor sino como una deuda (Romanos 4:4).
Por eso la promesa viene por la fe, a fin de que por la gracia... (Romanos 4:16).
¿Por qué dice a fin de que? Porque él entiende que la fe no merece recompensa. Por lo tanto es el único vehículo apropiado de la gracia. ¿Cómo podría entonces ser la fe una ley, sustancia o fuerza que nosotros controlamos para obtener bendición? ¿Dónde quedaría la gracia?
A los maestros de la prosperidad se les escapa esta paradoja. Precisamente, debido a que la fe bíblica NO es una ley, fuerza o sustancia, es que puede ser el vehículo de la gracia.
¿Dónde se origina la fe?
En el pensamiento de la Palabra de fe, esta última no es un don de gracia. La gracia contradice el concepto de una fuerza-sustancia mística manipulable a discreción nuestra.
La Biblia enseña claramente que la fe es un don de gracia. Aun cuando la gracia salvadora viene por medio de la fe, esta fe es generada por la misma gracia. Esto no es un razonamiento circular, porque Dios es el origen del proceso.
... [Apolos] ayudó mucho a quienes por la gracia habían creído (Hechos 18:27).
La gracia de nuestro Señor se derramó sobre mí en abundancia, junto con la fe y el amor que hay en Cristo Jesús (1 Timoteo 1:14).
En resumen
Frecuentemente los cristianos decimos que somos salvos por fe. ¿Acaso queremos decir que es la fe en sí misma la que nos salva? No. Se trata de una forma breve y bíblica de expresar que la fe es un instrumento vital para aproximar a Cristo, que es el que salva.
Una buena ilustración que viene al caso es cuando Jesús le dijo a una mujer arrepentida: Tu fe te ha salvado (Lucas 7:50). Lo que expresó es que la fe de la mujer abrió la puerta a Aquel que salva. Él nunca implicaría que la fe de la mujer por sí sola le daba la salvación. Si fuera así, no hubiera sido para nada necesario el que ella fuera a Jesús.
A veces la Escritura asocia dos cosas tan cercanamente que una se vuelve metáfora de la otra. Ejemplo: En Juan 17:3 y 12:50, la obediencia a los mandatos de Dios es llamada “vida eterna”. La obediencia en sí no es la vida eterna, pero lleva a ella. Sería absurdo llamar a la obediencia una sustancia mística que podemos manipular para generar vida eterna.
Asimismo, en la Escritura, la fe es tan vitalmente asociada a la obtención de bendiciones, que podría parecer que la fe por sí misma genera las bendiciones. Es una forma breve de mostrar la importancia de la fe, no para demostrar que la fe sea una fuerza mística que, manipulada apropiadamente, produce lo que nosotros queramos.
¿Resulta denigrante a la fe bíblica este cuestionamiento al así llamado Movimiento de la fe? No. Nuestra intención es que la fe esté en su posición correcta, no en una mayor ni menor a la correcta. Cristo, a su vez, recibe la gloria que merece.
El así llamado Movimiento de la fe, lleva un nombre equivocado. Estos maestros no ejercitan la fe en sentido bíblico alguno. Se trata de un movimiento pseudocristiano de idolatría, egotismo y narcicismo. ¿Idolatría? Sí. ¿Cuál es el ídolo? Ellos mismos.
En este capítulo aprendimos que...
1. El Movimiento de la prosperidad enseña que:
      La fe es una fuerza mística y una sustancia espiritual.
      Dios mismo dependía de la fe al crear al universo.
      Como dioses creados, los seres humanos tienen la capacidad de crear su propia realidad, manipulando la ley de la fe.
      Debemos tener fe en nuestra propia fe.
2. El Movimiento de la prosperidad no enseña la fe bajo ninguna definición bíblica.
3. La fe bíblica no es ni ley, ni fuerza, ni sustancia mística.
      La fe es una confianza sencilla en Dios.
      La fe es moralmente neutral, pues su valor depende del objeto al que se la asocie.
      El evangelio es un movimiento de la gracia, no un Movimiento de la fe.
      La fe es un don de la gracia de Dios
- ORAMOS PIDIENDO LA VOLUNTAD DE DIOS EN PRIMERA INSTANCIA:

1.- La Oración de Ezequías: (2 Reyes 20:1-21:2)
a) Ezequías era un rey recto ante los ojos de Dios (2 Rey. 18:5-6)
b) Ezequías enfermó y Dios le dijo que iba a morir.
c) Ezequías lloró y pidió a Dios ser sanado.
d) Dios le escucho y le concedió 15 años más de vida. (No hubo demanda)
* ¿Cuáles fueron las consecuencias?
a) Se llenó de orgullo y mostró sus tesoros a los babilonios, que años más tarde volverían y llevarían a Israel cautivo y junto a todos esos tesoros.
b) Se volvió insensible frente al futuro de sus descendientes.
c) Tuvo un hijo que reinó después de él, Manasés, y que fue el causante directo del cautiverio por todos los pecados de Israel. (2 Rey. 21:11-15)
2.- La Oración de Jesús: (Mateo 26:36-42)
a) Jesús sabía que la hora de morir estaba muy cerca.
b) Pidió al Padre que le librara de esa hora.
c) Pero, ante todo, puso por delante la voluntad del Padre.
d) El Padre dio su respuesta: NO. Sólo envió a un ángel para fortalecerle (Lucas. 22.43)
* ¿Cuáles fueron las consecuencias?
a) Jesucristo salvó a la humanidad por su muerte (Juan 3:16)
b) Dejó ejemplo de su obediencia al Padre (Filipenses 2:5-6)
c) Fue exaltado sobre todo (Filipenses 2:7-11)
3.- DIOS NO SIEMPRE RESPONDE CON UN SÍ:
Puede Responder
a) . Cuando oramos según su voluntad (1 Juan 5:14-15)
b) No. Cuando pedimos según nuestro propio deseo (Santiago 4.3) O cuando simplemente no es su voluntad (2 Corintios 12:8-9)
c)ESPERA. Cuando aún no es su tiempo. Ejemplo: Israel clamó por su liberación de Egipto, Dios lo libró en su tiempo (Éxodo 2:23-25)
d)EMPIEZA TU. Esto es cuando se requiere también nuestra participación. Ejemplo: David, cuando rescató a su familia de los amalecitas (1 Samuel 30:8)
4.- DIOS ES SOBERANO, NO UN ‘GENIO’ CUMPLIENDO NUESTROS DESEOS:

Ejemplo: La vida de Job
a) Dios permitió que Job lo perdiera todo.
b) Sus amigos pensaron que existía una causa.
c) Solo Eliú comprendió que Dios era soberano en todo lo que estaba sucediendo y que tenía todo el derecho de hacer según su voluntad.
Conclusiones:

1. G-12 propone confesiones positivas, la Biblia nos habla de peticiones conforme a la voluntad de Dios. No hay declaraciones.
2. Las confesiones positivas, a lo único que pueden llevarnos es a que pensemos que nosotros somos los amos, y no así Dios. Nosotros damos las órdenes y Él está obligado a obedecernos; todo esto es contrario a las sanas enseñanzas de la Biblia