lunes, 18 de junio de 2012

No me digas adiós, sino hasta luego.

No me digas adiós, sino hasta luego.

Quiero dedicar este escrito a todas aquellas personas que han perdido a alguien especial en sus vidas. La muerte es parte de la vida, pero nos es difícil asimilarla. Todos sabemos cuando nacemos pero no cuando ni como partiremos de esta vida.

Puede que estés pasando un amargo momento por haber tenido que darle un último adiós a esa persona que tanto amabas, que era especial para ti, con la cual compartiste muchos momenntos de tu vida y que nunca olvidarás. Lágrimas ruedan por tus mejillas llenas de dolor y tristeza.

Es triste cuando tenemos que despedirnos de alguien, y más cuando ha sido muy cercano a nosotros. No sé en que circunstancias esa persona partió, pero puedes tener la seguridad de que si en vida Aceptó a Cristo como Su Salvador Personal, no cabe duda que está en un lugar mejor, en la misma Presencia de Dios.

Pero somos seres humanos, y es inevitable sentirnos mal por aquellos que han dejado este mundo. Es parte de la naturaleza el hecho de morir, y muchos lastimosamente NO estamos preparados para ese momento. Es por ello que quiero motivarte a que HOY MISMO aceptes a Jesús como Salvador de tu alma.

En la parte superior de este sitio se encuentra una oración que espero puedas hacer, para asegurar tu entrada en el Cielo cuando te toque morir. Y para aquellos que están pasando dolor, tristeza, soledad porque han visto partir a alguien, aquí dejo este video, el cual lleva un mensaje de consuelo.

Un mensaje de animo, que debemos recordar que los que parten de este mundo, si se van con Cristo, están mucho mejor que nosotros. Vivamos cada día como si fuera el último, no dejemos nada a la deriva, ordenemos nuestras vidas, amemos, perdonémos y pidamos perdón. Dios te bendiga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario