Amor o Lujuria. Cual es la diferencia?
¿Amor o lujuria?
Consejo sobre el noviazgo: sí la lujuria es el motivo de tu relación entonces nunca funcionará. He aquí el por qué.
por Duncan Moore
Crecí en una familia atea y no
fue hasta que entre a la Universidad en donde conocí a muchos
cristianos, quienes parecian gente Buena y habia algo en la amistad
entre ellos que yo envidiaba. Sin embargo, me parecían también muy
simples. Su inocencia, particularmente en el área sexual y moral,
llamaban mi atención y tolerante simpatía. Entonces mi forma de pensar
cambio radicalmente. En este articulo me gustaría mostrar unas muy
buenas razones para tomar en serio las enseñanzas de la Biblia sobre el
sexo.
Contrario
a lo que la mayoría piensa sobre los cristianos en cuanto al sexo,
ellos no lo ven como algo malo. Dios creo el sexo para que fuera bueno y
para que lo disfrutáramos. El sexo no solo significa embarazo sino
también intensidad, gozo, expresión apasionada del amor. Dios diseñó un
contexto para disfrutar mejor del sexo. Este contexto es el matrimonio
entre un hombre y una mujer. La cultura contemporánea en todo el mundo
ha descartado estos significados del sexo. ¿Deberían los cristianos ver
esto como irrelevante o esto nos muestra que hemos olvidado principios
importantes?
Razones Pragmáticas
Desde un punto practico encontramos muchas ventajas al seguir los
consejos bíblicos sobre el sexo. La primera ventaja es que nos
protegemos de enfermedades trasmitidas sexualmente. Esto significa mucho
en varios países en donde el SIDA es la principal causa de mortandad y
afectación en la economía. Otra ventaja es que nos protege de un
embarazo no deseado fuera del matrimonio.
Manteniéndonos las relaciones sexuales
solo para el matrimonio, nos protege también de la dolorosa comparación
entre las diversas parejas con las que se ha tenido relaciones sexuales.
Esto incluye algunas situaciones en donde solo una persona de la pareja
esta realmente enamorado/a y la otra persona solo esta interesado/a en
tener un orgasmo.
Una ventaja mas es que nos evita volvernos adictos a nuestros
deseos sexuales. Alguna vez alguien menciono que nuestros deseos
sexuales tienen la potencia de un motor de Ferrari y los frenos de una
bicicleta. Si decidimos alimentar y dar placer a nuestros deseos
sexuales, será cada vez mas difícil permanecer fiel en nuestro
matrimonio, añadiendo toda la agonía emocional que nos da la
infidelidad. Las estadísticas sobre el divorcio reflejan las
consecuencias de nuestros valores sexuales.
Razones Ideológicas
Las razones practicas por si solas no son suficientemente
convincentes para entender mejor los consejos bíblicos sobre el sexo.
Así que, también hay razones teóricas fundamentales para situar las
relaciones sexuales únicamente dentro del matrimonio. Dios no creo el
sexo solo para tener orgasmos, sino para darnos una expresión mas de
amor e intimidad sexual.
Tener relaciones sexuales con una persona es algo
totalmente profundo y hermoso pero puede ser totalmente devastador si se
confunde el verdadero concepto de este acto. Hay una historia sobre un
hombre que demando en una corte legal a los fabricantes de una podadora.
Este hombre se lastimo una mano por intentar cortar un arbusto y su
argumento para su demanda era que en las instrucciones no decía nada
acerca de usar esta podadora con un arbusto. El sexo, de manera similar,
puede lastimar mucho sino se usa de acuerdo a las instrucciones del
fabricante.
Para entender la perspectiva de la Biblia sobre el sexo, debemos
entender la diferencia entre el amor y la lujuria. El amor honra, valora
y busca lo mejor para la otra persona; es desinteresado, sacrificado,
comprometido. Por otro lado, la lujuria usa las situaciones o personas
para que se moldeen de acuerdo a las necesidades de una persona
solamente; es egoísta, se encierra en si misma y no acepta el
compromiso.
El amor y la lujuria son totalmente opuestos. Se repelen
constantemente. Lo que debemos preguntarnos es si nuestras relaciones
sexuales son expresiones de amor o lujuria: "yo quiero respetarte y
valorarte entregándome completamente a ti" o "yo quiero usarte para
satisfacer mis necesidades, especialmente para tener orgasmos". Si Dios
creo el sexo como expresión de amor, entonces la lujuria es una mentira
que lastima y destruye.
La función del matrimonio
El matrimonio es un misterio, la unión de dos
personas para convertirse en una sola. El matrimonio no garantiza o
impone el amor. Pero si se toma en serio como un compromiso
incondicional de fidelidad y credibilidad por el resto de nuestras
vidas, entenderemos la diferencia entre el amor y la fidelidad. Así como
la prueba para reconocer ácidos a través del tornasol, el matrimonio es
la prueba para saber si hay un compromiso verdadero. Pero, como sabemos
que realmente amamos a alguien para tener relaciones sexuales con esa
persona? El matrimonio nos da la pauta para saber si realmente queremos
comprometernos con esta persona por el resto de nuestras vidas.
El matrimonio
es como una red de seguridad. Todos somos frágiles e imperfectos. ¿Como
es que podemos estar seguro del amor de nuestra pareja con nuestros
fracasos e inseguridades? La respuesta es una vez mas: compromiso. Si no
hay compromiso de por medio, entonces el amor no es legitimo y las
relaciones sexuales nos dan solamente un orgasmo en el que técnicamente
no son necesarias dos personas.
Conclusión
a lujuria es
poderosa y seductora, pero es egoísta y opuesta al amor. Si fomentamos y
alimentamos la lujuria estamos expuestos a un dramático aislamiento,
soledad, inseguridad y vacío. ¿Que nos queda cuando los orgasmos se
convierten en algo que no nos satisface mas y nos aburren, cuando nos
sentimos solos con sentimiento de culpa y soledad?
El amor como
compromiso es muy difícil y requiere mucho trabajo. Requiere también
honor, respeto, perdón y sacrificio. Desafortunadamente en nuestras
diversas culturas no se aprecia el resultado de amar correctamente;
sustituimos frecuentemente el amor por la lujuria y siempre terminamos
con sentimientos de perdida y soledad en nuestra vida sin significado y
no podemos satisfacernos fuera del área física.
La intención de Dios es que
seamos libres de la esclavitud de la lujuria y seamos hombres y mujeres
con amor verdadero. Dios conoce nuestros pensamientos de lujuria y aun
así Él nos ofrece perdón y Su amor para poder comenzar una relación
personal con Él. El amor que experimentamos cuando decidimos conocer a
Dios personalmente se va revelando en nuestras relaciones con los demás.
Nuestras opciones son responder a Su llamado y conocerle o ignorarle y
dejar a un lado el plan que Dios tiene para cada uno de nosotros. Plan
que se resume en una vida con propósito y verdadero amor.
¿Te gustaría
tener este tipo de relación con Dios para conocer Su amor y Su plan para
tu vida?
No hay comentarios:
Publicar un comentario